¿A cuántos de ustedes le gusta fallarle a Dios? Estoy seguro de que si has nacido de nuevo, no quieres fallarse a Dios. No planificamos fallarles a Dios, pero le fallamos porque no planificamos la forma de no fallarle.
Una de las grandes luchas que tienen los cristianos cuando venimos a los pies del Maestro es nuestra antigua manera vivir.
Jesús murió a la cruz para que seas libre del pecado, pero sabemos que todavía seguimos luchando con esa antigua manera de vivir. Sin embargo, recuerda que “con Cristo estamos juntamente crucificados y no vivo yo, mas vive Cristo en mí”.
¿Cómo podemos sobre llevar la tentación para no fallarle a Dios?
17 No paguéis a nadie mal por mal; procurad lo bueno delante de todos los hombres (Rom. 12:17, RV60).
La palabra griega traducida como “procurad” literalmente significa “planear antes de tiempo”. Es necesario que planifiquemos de antemano la conducta correcta. Al planificar la conducta correcta, se nos será más fácil resistir la tentación.
Para resistir la tentación debemos de:
Despojarnos del viejo hombre
El primer aspecto en nuestra carrera para resistir la tentación es identificar y eliminar los factores que obstaculizan el cambio bíblico en nuestras vidas.
Aquellas cosas o personas que nos provocan caer en el pecado deben ser eliminadas, no llegar a una tregua. Muchas veces nosotros queremos negociar con el pecado, si hay personas o lugares que sabemos que nos son ocasión de caer, debe ser cortadas.
El cristiano no solo debe evitar personas y lugares que puedan conducirlo a la tentación sino que también toda la práctica que pueda contribuir a su problema.
29 “Por lo tanto, si tu ojo —incluso tu ojo bueno— te hace caer en pasiones sexuales, sácatelo y tíralo. Es preferible que pierdas una parte de tu cuerpo y no que todo tu cuerpo sea arrojado al infierno. 30 Y si tu mano —incluso tu mano más fuerte— te hace pecar, córtala y tírala. Es preferible que pierdas una parte del cuerpo y no que todo tu cuerpo sea arrojado al infierno” (Mt 5:29-30, NTV).
El ojo derecho representa la protección de la cultura judía. En la cultura judía mano derecha es importante, porque solo con la mano derecha es que se puede comer y con ella es que invocada el nombre de Dios y se realizaban los sacrificios algún el libro de Levíticos.
Así que Jesús les está diciendo que si lo que los protege o lo que los mantiene vivo, porque comen con ella, si aun eso les es ocasión de caer, es mejor entrar al cielo sin eso, que perderse.
Revertirse con el nuevo hombre
El proceso de planificación debe incluir no solo eliminar el pecado, sino también incorporar pensamientos y conductas bíblicas.
“Más bien, vístanse con la presencia del Señor Jesucristo. Y no se permitan pensar en formas de complacer los malos deseos” (Ro. 13:14, NTV).
Para vestirnos del nuevo hombre:
Involucrarse con el cuerpo local (Col. 1:18, NTV)
“Cristo también es la cabeza de la iglesia, la cual es su cuerpo. Él es el principio, es supremo sobre todos los que se levantan de los muertos. Así que él es el primero en todo.
Buenas amistades (1 Ti. 2:22, NTV)
“Huye de todo lo que estimule las pasiones juveniles. En cambio, sigue la vida recta, la fidelidad, el amor y la paz. Disfruta del compañerismo de los que invocan al Señor con un corazón puro”.
Estudio de la palabra (Jn 5:39, NTV)
“Ustedes estudian las Escrituras a fondo porque piensan que ellas les dan vida eterna. ¡Pero las Escrituras me señalan a mí!”
Rendir cuentas (Stgo. 5:16, NTV)
“Confiésense los pecados unos a otros y oren los unos por los otros, para que sean sanados. La oración ferviente de una persona justa tiene mucho poder y da resultados maravillosos”.
El uso sabio del tiempo (Ef. 5:16, NTV)
“Saquen el mayor provecho de cada oportunidad en estos días malos”.
Servir a otros (Mt. 25:40, NTV)
“Y el Rey dirá: Les digo la verdad, cuando hicieron alguna de estas cosas al más insignificante de éstos, mis hermanos, ¡me lo hicieron a mí!”